sábado, diciembre 11, 2010

Nada es tan bonito como parece.

Estaba pensando en hacer el post de presentación, y de hecho, lo tengo ya en borrador, pero me falta una foto que encontré hace mucho tiempo de un demotivational sobre Uruha de The GazettE que quería agregar para una parte específica de mi presentación.

Pero, con, o sin esa foto, voy a agregar unas opiniones.

Para que comprendan todo lo que voy a decir, pido el favor de que lean este texto. Aunque en inglés, es realmente bueno.

Interview with an ex-visual kei record executive, por el blog Tokyo Damage Report. (En inglés)

Supe de esta entrevista gracias a que alguien posteó unos documentos sobre el funcionamiento interno de la industria del visual kei. Es también un buen documento, y es una muestra del lado oscuro de la industria del entretenimiento en Japón.

Estoy algo triste. Un poco decepcionada. Pero también, tuve una sensación de "me lo temía". Ya estoy acostumbrada a que de repente me abran los ojos con las cosas que me gustan, de que no todo es tan bonito como quisiera.
Me suele pasar con frecuencia. No sólo con mis aficiones, no sólo incluso con la gente que admiro. También ha pasado con personas de mi entorno (ya sea en la vida real, o en la Red), que me han decepcionado.

Es una sensación que me ha seguido en este 2010.

La desilusión, la decepción. Yo también tengo sentimientos, a mí también me molesta cuando las cosas no son como creí que eran. También sé que a veces mis ilusiones se rompen. También las tengo.

Este texto es demasiado interesante, pero también una buena bofetada.

Muchos me conocen. De mí no esperen que me ilusione demasiado de cualquier cosa. De mí no esperen que me obsesione. Puedo ser una adolescente pero no soy una tonta.

Y debido a esto he decidido tomar unas decisiones algo fuertes con respecto al visual kei.

Como música, a pesar de que en realidad son los productores quienes hacen todo, que en realidad las bandas no hacen casi nada, que son en realidad ex-delincuentes, gente que abandonó la escuela, o simplemente chicos que son pobres, que viven de asalariados al meterse en esta industria, voy a seguir escuchándola, y la disfruto.

Pero he tomado una decisión.
Si bien nunca he comprado un disco de música por internet, ni mucho menos tengo discos de bandas visual kei, todo lo he bajado, debido a varios factores (¿En serio me ven capaz de querer gastarme mi dinero en nosecuántas versiones de un single donde la canción principal es siempre la misma? Entre otros ejemplos...), especialmente económicos, voy a continuar con esta costumbre. No le voy a dar mi dinero ni a Tommy Dynamite, ni a Yoshiki.

Y en el caso particular de Yoshiki, soy incluso, capaz de declinar de querer cualquier cosa de la discografía de X JAPAN por métodos oficiales. Podría permitirme comprar por los métodos de compra directa de eBay, o cosas así, pero no de forma oficial y los motivos los da el artículo.

Puede que al final acabe pasando del visual kei, pero por lo menos, a pesar de toda esta farsa, por lo menos seguirá significando algo para mí, así sea como la música que me ayudó a sobreponerme de crisis existenciales en su momento.

El blog apenas comienza y de todas formas aún tengo muchas cosas qué penguinslappear. Tengo muchas banda de qué expresar mis quejas.

Pero por ahora, debo pensar.

Kanaru von Pepinous.

1 comentario:

  1. Me interesa mucho tu blog, interesante de verdad.
    Yo también me topé con ese artículo del lado negativo del visual kei y también fue una bofetada para mí. Quedé mucho tiempo filosofando sobre aquello, y llegué a esta conclusión: el visual es la música que a mí me gusta, y no estoy hablando por visualmente: estoy hablando musicalmente. Tiene ese no se qué (sé de música pero todavía no puedo entenderlo si bien hay varios elementos muy recurrentes en las composiciones visual) que lo hace especial por sobre cualquier otro tipo de música que escuche y me guste. A raíz de eso pienso que no hay que generalizar; obviamente, jamás voy a poder saber si Mana o Kyo o Kamijo eran ex-delincuentes buenos para nada a quienes les pagaron por aprender dos notas y ponerse un vestido, pero vamos, hay gente y gente: hay quienes harán las cosas bien y otros mal como en todo el mundo. Si bien YOSHIKI aquí se describe como un "demonio comercial", la verdad es que sin su inventiva y servicios prestados por primera vez, es poco probable que el visual esté donde está ahora (X era despreciado por casi la entera escena musical japonesa por sus looks, y YOSHIKI debió solventar él y su madre los gatos del momento cuando no eran famosos para él y las otras bandas que los acompañaban); y sobre su calidad artística, le respeto por sobre muchos otros si bien X no es mi banda preferida. ¿Me entiendes de qué hablo? Me es muy difícil expresarme como quiero redactando rápido, pero quiero que quede esta idea: no creo que absolutamente TODOS los artistas visual sean unos buenos para nada; quizás una mayoría sí, peor no todos. Por más que seamos o no, se puede saber muy facil cuando algo es bueno o no, cuando algo tiene sentido de obra de arte o para vender.

    ResponderEliminar